La noche estrellada y el rumor de una fiera salvaje y violenta recorriendo las calles, devorando al que se le ponga enfrente.
El miedo es un par de ojos ciegos que distinguen un hermoso jardín en medio de la oscuridad.
La estatura mental de los habitantes de una ciudad cualquiera es igual al tamaño de su Liliput interno.
No quiero morir por tu maldita arrogancia.
el poeta furioso
futuros improbables
garabatos frenéticos de
mediúm poseso
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