Los árboles amarillos
boycotean las avenidas
Las banderas negras de las fábricas
sobre la ira roja de las calderas
cañones antiaéreos
con granadas de estrellas
y esa luna derretida
que acidula de azul los horizontes
Por las calles paroxistas
la alarma riega su horror
¡ Dios mío ! la angustia estrangula
todas las gargantas
y en esa laminé satánica
la epilepsis de los edificios
La lujuria arrastra por mis venas
todo un rosario de brasas
Y el chorro brusco de tus palabras
es un flagelo sádico
1 comentario:
que temas trata este poema
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